A una escasa hora de Múnich se encuentra la ciudad de
Ingolstadt.
Conocida por su fuerte, donde el futuro presidente de la República
Francesa, Charles de Gaulle, sería hecho prisionero durante la Primera Guerra
Mundial, a Ingolstadt también se la conoce por ser la sede central de Audi
desde que los dirigentes del fabricante de vehículos decidieran trasladarla -gracias,
en parte, al Plan Marshall- a esta bien comunicada localidad bávara.
Más allá de la industria, también hay lugar en Ingolstadt para
lo esotérico y lo literario, pues esta localidad vio fundarse -o probablemente
no, dado su secretismo- a esa organización conocida como Illuminati (Illuminati
de Baviera, originalmente) el 1 de mayo de 1776, además de ser el lugar en el
que el negligente Víctor Frankenstein da vida al monstruo homónimo en la novela
más significativa de Mary Shelley.
El “monstruo” que nos concierne hoy es este Ingolstadt,
líder invicto de la 2. Bundesliga.
El FC Ingolstadt 04, club fundado en 2004
surgido de la fusión de dos equipos locales rivales, el MTV Ingolstadt y el ESV
Ingolstadt, cumple sus primeros diez años de vida con las miras puestas
en ascender (por primera vez, evidentemente) a la Bundesliga.
La escalada desde su inicio en la Bayern Oberliga (la cuarta
división del fútbol alemán), la Regionalliga y finalmente la 2. Bundesliga
parecía haber tocado techo, máxime tras la caída de la segunda división a la 3.
Liga en 2010. Con el equipo afianzado nuevamente en la 2. Bundesliga desde 2011
y observando la situación actual del Fussballclub Ingolstadt, las estadísticas parecen invitar al optimismo a los aficionados del ‘Die Schanzer’, lema con el que se
conoce al equipo.
El Schanzer Herz -el
himno oficial del Ingolstadt que compuso la banda local Bonfire- resuena en el
campo del conjunto rojinegro, el Audi Sportpark (con capacidad para 15000
espectadores, el quinto estadio de la categoría más pequeño en aforo).
Esta temporada, el equipo que dirige el austríaco Ralph
Hasenhüttl es líder con 25 puntos tras 11 partidos jugados, con un balance de
siete victorias, cuatro empates y ninguna derrota.
Uno de los baluartes de este equipo es el también austríaco
Lukas Hinterseer, máximo goleador con cinco tantos, y quien debutó con la
selección absoluta de Austria el pasado 12 de octubre sustituyendo a Arnautovic
en el partido que el Das Team venció
por 1-0 a Montenegro.
Parecen correr buenos tiempos para el Schanzer. Quién sabe si la temporada que viene el FC Ingolstadt podría
ser el segundo equipo de la región de Baviera en la Bundesliga e incluso, como
otro aliciente curioso, protagonizar un derbi automovilístico: el Audi-Volkswagen
en el que hipotéticamente se enfrentaría al Wolfsburgo.
El (otro) monstruo de Ingolstadt ha despertado.
