En 2011, por iniciativa de Michel Platini, presidente de la UEFA, se entregó por primera vez el Premio al Mejor Jugador de la UEFA en Europa, lo que viene a ser el extinto premio al Futbolista Europeo del año.
De momento, este galardón es de color azulgrana. El primer año, Leo Messi se lo llevó por goleada (muletilla fácil) al superar a los otros dos finalistas: su compañero Xavi y Ronaldo (el portugués). La diferencia de puntos fue abismal: Messi: 39; Xavi: 11; Ronaldo: 3.
El año pasado, en la segunda edición, las votaciones fueron bastante más igualadas. Reaparecían entre los tres finalistas Messi y Ronaldo (con 17 puntos cada uno). La novedad era Iniesta, quien convenció a 19 miembros del jurado y se llevó un premio que parecía predecir quién iba a ser el siguiente Balón de Oro, pero no. Se tuvo que conformar con ser el mejor jugador europeo de la UEFA.
Ah, sí... lo del jurado, quién elige al mejor y tal.
El jurado está formado por 53 periodistas deportivos representantes de cada una de las federaciones miembro de la UEFA. El máximo estamento del fútbol del viejo continente tiene visible en su web el panel de votantes que decidirán quién es el ganador. Ahí podéis ver a qué federación representa cada periodista, el medio al que pertenece, su puesto de trabajo, e incluso su momento favorito de una competición UEFA y futbolista favorito que ha jugado en Europa. Todo esto os puede ayudar a la hora de hacer vuestras cábalas sobre a quién apoyará cada uno, quién barrerá para casa (rollo Eurovisión, aunque esperemos que menos descarado), etcétera.
Una curiosidad: entre esos periodistas solo hay una mujer, Giorgia Bertozzi, representante de la federación de San Marino (país de gran tradición futbolística, por cierto).
Ah... otra cosa curiosa: el representante de la federación española es Carlos Carpio, subdirector de MARCA. Por si os interesa.
Este jueves, durante la ceremonia del sorteo de la fase de grupos de la Champions, se entregará el premio de 2013.
¿Los nominados? Omnipresente Lionel, Omnipresente Cristiano y Comedido Frank.
¿Mi pronóstico? Ya lo tengo. Atendiendo a la procedencia y al gusto de los periodistas antes mencionados, me he tomado la licencia de elaborar el podio yo mismo, con los votos que conseguirá cada jugador y todo. Este es el resultado de mis arriesgadas suposiciones: Messi: 22; Ribéry: 18; Ronaldo: 13.
Bueno, ya veremos.
martes, 27 de agosto de 2013
martes, 13 de agosto de 2013
Hacerse grande
Hoy es 13 de agosto. Inauguro mi blog. Podría hablar de la última hora del posible traspaso de David Luiz al Barça o de si Casemiro es la sorpresa del verano. Podría también comentar que justamente hoy el Real Jaén cumple 91 años de historia o que el otrora presidente del Betis, Manuel Ruiz de Lopera, llega a la mágica cifra de 69 -años, se entiende-, pero no. Voy a estrenar mi Balompédica Mente hablando de alguien que también hoy cumple años. Concretamente, 43. Se trata del mítico delantero Alan Shearer.
Inicia su carrera profesional con el Southampton (1986-1992) y, en su primer partido, dos años después de fichar por Los Santos, le enchufa un hat-trick al Arsenal. Ya apunta maneras.
En el '92 debuta con la selección inglesa absoluta y también moja en el 2-0 ante Francia. A partir de ahí, será un habitual en el combinado nacional.
Ese mismo año se lo lleva el Blackburn Rovers de Kenny Dalglish, donde empieza a hincharse a marcar goles temporada tras temporada (112, en total).
Goles que, sin embargo, no le reportan al conjunto de Lancashire el título de liga... hasta 1995. Esa temporada, la 1994/95, a Shearer le acompaña en ataque un nuevo refuerzo, Chris Sutton, con quien forma un dupla ofensiva letal. Un binomio bautizado como 'SAS' (Shearer and Sutton).
Resultado: tercera Premier en la historia del Rovers y primer (y único) título en la carrera de Alan Shearer.
Después viene la Eurocopa de 1996, donde la Selección de Inglaterra, la anfitriona, queda apeada en semifinales tras perder ante Alemania en la tanda de penaltis. No sé si recordáis a quién se cargó Inglaterra en cuartos, pero ahí va una pista: Hierro y Nadal fallaron en la tanda decisiva.
Una curiosidad: Alan Shearer se erigió, con cinco goles, en máximo anotador de la competición, siendo hasta la fecha el único futbolista inglés que ha encabezado la lista de máximos goleadores de la Eurocopa.
Después de la Euro, el Manchester United le hace una oferta, pero Shearer la rechaza y acaba recalando en St James Park para jugar en el Newcastle United, el equipo de su ciudad natal. A finales de año, Alan Shearer queda tercero, por detrás de Ronaldo -el verdadero, el brasileño- y de Matthias Sammer, en la edición del Balón de Oro.
El conjunto Magpie acaba la liga en una buenísima segunda posición y Shearer anota 25 goles en 31 partidos. Todo ello le sirve a Las Urracas para clasificarse a la Champions League de la temporada siguiente en la que, por cierto, se enfrentarán al Barça de Louis van Gaal en la liguilla de grupos. Alan no jugará ni este ni muchos otros partidos debido a una grave lesión de ligamentos que se produce en verano y que le mantendrá alejado de los terrenos de juego durante un buen periodo de tiempo.
En el verano de 1998 es nombrado capitán de la selección inglesa.
Llega el Mundial de Francia '98 y... poca historia. Shearer marca dos goles. Inglaterra cae en octavos ante Argentina.
Llega la Eurocopa 2000, de Bélgica y Países Bajos y... menos historia aún. Shearer marca otros dos goles. Inglaterra cae en primera ronda.
Shearer se retira del fútbol internacional.
Seguirá marcando goles para el Newcastle hasta 2006, año de su retirada (precipitada) del fútbol profesional tras una lesión de ligamentos.
No ganó numerosos títulos, no jugó en un grande, no fue Balón de Oro. Sin embargo, se convirtió en una de esas leyendas del fútbol -inglés, europeo y mundial- a las que recordaremos por dejar en nuestro recuerdo tantos y tantos goles. Para despedir, un último dato perdurable en las mentes balompédicas: 260 goles que le convierten en el máximo goleador de la historia de la Premier League.
Alan, sé que estás leyendo esto... Happy Birthday!
Inicia su carrera profesional con el Southampton (1986-1992) y, en su primer partido, dos años después de fichar por Los Santos, le enchufa un hat-trick al Arsenal. Ya apunta maneras.
En el '92 debuta con la selección inglesa absoluta y también moja en el 2-0 ante Francia. A partir de ahí, será un habitual en el combinado nacional.
Ese mismo año se lo lleva el Blackburn Rovers de Kenny Dalglish, donde empieza a hincharse a marcar goles temporada tras temporada (112, en total).
Goles que, sin embargo, no le reportan al conjunto de Lancashire el título de liga... hasta 1995. Esa temporada, la 1994/95, a Shearer le acompaña en ataque un nuevo refuerzo, Chris Sutton, con quien forma un dupla ofensiva letal. Un binomio bautizado como 'SAS' (Shearer and Sutton).
Resultado: tercera Premier en la historia del Rovers y primer (y único) título en la carrera de Alan Shearer.
Después viene la Eurocopa de 1996, donde la Selección de Inglaterra, la anfitriona, queda apeada en semifinales tras perder ante Alemania en la tanda de penaltis. No sé si recordáis a quién se cargó Inglaterra en cuartos, pero ahí va una pista: Hierro y Nadal fallaron en la tanda decisiva.
Una curiosidad: Alan Shearer se erigió, con cinco goles, en máximo anotador de la competición, siendo hasta la fecha el único futbolista inglés que ha encabezado la lista de máximos goleadores de la Eurocopa.
Después de la Euro, el Manchester United le hace una oferta, pero Shearer la rechaza y acaba recalando en St James Park para jugar en el Newcastle United, el equipo de su ciudad natal. A finales de año, Alan Shearer queda tercero, por detrás de Ronaldo -el verdadero, el brasileño- y de Matthias Sammer, en la edición del Balón de Oro.
El conjunto Magpie acaba la liga en una buenísima segunda posición y Shearer anota 25 goles en 31 partidos. Todo ello le sirve a Las Urracas para clasificarse a la Champions League de la temporada siguiente en la que, por cierto, se enfrentarán al Barça de Louis van Gaal en la liguilla de grupos. Alan no jugará ni este ni muchos otros partidos debido a una grave lesión de ligamentos que se produce en verano y que le mantendrá alejado de los terrenos de juego durante un buen periodo de tiempo.
En el verano de 1998 es nombrado capitán de la selección inglesa.
Llega el Mundial de Francia '98 y... poca historia. Shearer marca dos goles. Inglaterra cae en octavos ante Argentina.
Llega la Eurocopa 2000, de Bélgica y Países Bajos y... menos historia aún. Shearer marca otros dos goles. Inglaterra cae en primera ronda.
Shearer se retira del fútbol internacional.
Seguirá marcando goles para el Newcastle hasta 2006, año de su retirada (precipitada) del fútbol profesional tras una lesión de ligamentos.
No ganó numerosos títulos, no jugó en un grande, no fue Balón de Oro. Sin embargo, se convirtió en una de esas leyendas del fútbol -inglés, europeo y mundial- a las que recordaremos por dejar en nuestro recuerdo tantos y tantos goles. Para despedir, un último dato perdurable en las mentes balompédicas: 260 goles que le convierten en el máximo goleador de la historia de la Premier League.
Alan, sé que estás leyendo esto... Happy Birthday!